Quiere Gobierno terminar al narco prohibiendo palabras: expertos

Investigadores, periodistas y académicos censuraron ayer la ‘recomendación’ con tinte de ‘orden’ girada por el Gobierno federal a voceros y titulares de las diferentes instancias de Seguridad Pública de no utilizar más en sus boletines las palabras ‘ejecutado’, ‘levantón’, ‘cártel’, ‘capo’ y otras terminologías del argot del narcotráfico.
Para Edgardo Buscaglia, académico e investigador en temas de seguridad y narcotráfico, la eliminación de este léxico en la información oficial para mejorar la percepción ciudadana, como pretende el gobierno de Enrique Peña Nieto, sólo muestra que no existe una estrategia efectiva en la lucha anticrimen. “Lo trágico es que no tienen estrategia”, planteó.

Para la periodista Sanjuana Martínez, la violencia no es una percepción, es una realidad.

“En México siguen habiendo ejecutados, descuartizados, decapitados, colgados de los puentes, balaceras, secuestros, extorsiones, desapariciones, siguen pasando todos los días, lo que pasa es que ahora se quiere silenciar por orden de Los Pinos”, puntualizó.

El fin de semana, el asesor presidencial Óscar Naranjo Trujillo, así como funcionarios federales “recomendaron” a voceros y titulares de las secretarías de Seguridad Pública erradicar de la información oficial términos como “ejecutado”, “capo”, “jefe de finanzas”, “lugarteniente”, “encajuelado”, “encobijado”.

Tales directrices fueron giradas durante el Primer Encuentro Nacional de Comunicadores en Seguridad Pública, celebrado el pasado fin de semana en Acapulco, Guerrero.

Ahí se explicó que se pretende evitar que la percepción ciudadana sea que los criminales son poderosos o héroes imbatibles.

No quieren, por ejemplo, otro caso como el de “La Barbie”, un presunto narcotraficante que reía durante el anuncio oficial de su captura ante los medios de comunicación.

Por ello, el Gobierno Federal ‘recomendó’ a los voceros y jefes de policía, no presentar a los detenidos en vivo, ni exhibirlos con armas o droga, así como evitar el uso de apodos de los imputados y que estos concedan entrevistas a los medios.

“Tales recomendaciones son preocupantes por el control y censura que pretenden ejercer hacia los medios de comunicación”, dijo el periodista Marco Lara Klahr.

Especialista en temas de delito, violencia y medios, derechos humanos y la reforma al Sistema de Justicia Penal, Lara Klahr dijo que el Gobierno Federal no se rige por principios de legalidad y protección a los derechos humanos, sino para cuestiones de “percepción”.

“Mientras esas pautas no se traduzcan en normas institucionales de cumplimiento obligatorio, con consecuencias del orden civil, administrativo y penales para los servidores públicos que las trasgredan, esto no tendrá ningún valor”, observó.

Durante la administración de Felipe Calderón los “shows mediaticos”, impulsados principalmente por Genaro García Luna, donde se violentaron los derechos humanos de los imputados, nunca hubo sanciones para los servidores públicos que incurrieron en estas prácticas.

Y aunque para el asesor presidencial Óscar Naranjo Trujillo la percepción de la inseguridad en México creció a raíz de tanta exhibición de tanto detenido, para Lara Klahr existe el derecho a la información y la libertad de expresión, eso sí, responsable.

¿Cuál es la razón por la que el periodista, por ejemplo, no debe hablar de ejecutados?, cuestionó. Para el investigador Edgardo Buscaglia, el Gobierno Federal sólo muestra que no existe una estrategia efectiva en la lucha anticrimen.