NOTA DEL BLOG:
OTRO HECHO AISLADO DIRÁ EL GOBERNADORZUELO COBARDE DE VERACRUZ JAVIER DUARTE ...QUIEN AL IGUAL QUE SU HOMOLOGO EGIDIO TORRE DE TAMAULIPAS SIEMPRE HAN DICHO ¡NO PASA NADA! MIENTRAS LOS ESTADOS DESMORONANDOSE EN MANOS DE ZETAS Y CDG
Testigos muchos, valientes para narrar los hechos, pocos. Eran las 21
horas con 40 minutos de la noche cuando la tranquilidad fue
interrumpida, cuando el sonido de la música fue opacada por el ruido de
las balas, cuando las risas se convirtieron en gritos, pasaron a ser
llanto y tristeza.
Los sicarios preguntaron por el “Negro”, y mataron a “Fito Memelas”, ingresaron al
lugar y se levantó Rodolfo “El Pachinga”, el hijo, con el cuerpo de su
cuerpo yaciendo entre las sillas y casi debajo de una mesa dijo:
“Vinieron por mí, llévenme, llévenme” recibiendo respuesta inmediata,
“Venimos a matarte” de acuerdo a alguien que vivió esto en cuerpo y alma
y que de entre el anonimato narró su historia como muchas que surgirán
luego de estos hechos. Puse las fotos feas hasta abajo
la familia Wirth ya había sufrido un atentado meses antes, cuando su domicilio fue baleado por un grupo armado.
Comando armado llegó a donde se celebraba una fiesta infantil y mataron a tres, dejando gravemente heridos a dos más.
FUENTE: CARLOS GONZALEZ ALONSO
Juan Díaz Covarrubias, municipio de Hueyapan de Ocampo, Ver.
Juan Díaz Covarrubias, municipio de Hueyapan de Ocampo, Ver.
Las risas y la música infantil cesaron de pronto cuando un comando
armado llegó a una fiesta de cumpleaños para ejecutar a tres personas y
dejar heridas de muerte a dos más, mismas que se debaten entre la vida y
la muerte en clínicas del puerto de Coatzacoalcos, adonde fueron
trasladados de urgencias.
Una fiesta infantil se celebraba en el salón de fiestas “El Gran
Chaparral”, ubicado en las afueras de la comunidad de Juan Díaz
Covarrubias y a orillas de la carretera. La música se mezclaba con los
gritos de alegría de decenas de pequeñines que esperaban ansiosos el
momento de romper las piñatas, de repartir dulces y entregar los
consabidos regalos al festejado, mientras los adultos disfrutaban
también el ver correr a su niños, otros simplemente platicaban y algunos
más se refrescaban aprovechando la ocasión.
De pronto, todos callaron y voltearon hacia la carretera pues dos
unidades frenaron con rechinar de llantas bajándose hombres fuertemente
armados que ingresaron corriendo hacia el lugar, gritando a todos que no
se movieran mientras ellos buscaban a los objetivos. Uno de ellos,
Rodolfo Armando Wirth Cobos, de 29 años de edad, se encontraba adentro
del local, junto a la barra y fue el primero en caer muerto a balazos
mientras que su padre Rodolfo Wirth Escalante, de 54 años de edad, se
encontraba afuera del local, quedando ahí mismo tendido en el piso con
varios balazos en el cuerpo.
Al parecer eran los dos únicos objetivos, pero el miedo, el terror de
ver personas fuertemente armadas en una fiesta infantil hizo que otro
invitado, José María Wirth intentara huir siendo alcanzado por las balas
asesinas, quedando mortalmente herido y murió minutos más tarde cuando
era trasladado al Seguro Social de Covarrubias; mientras que Gerardo
Moreno Gómez de 33 años de edad y Alejandro Contreras Contreras de 22
años de edad, fueron alcanzados por balas perdidas, siendo trasladados
de urgencias al puerto de Coatzacoalcos intentando salvarles la vida.
Cometida su fechoría, los asesinos subieron nuevamente a sus
unidades, una camioneta tipo Vagoneta color blanca y un auto color
blanco, huyendo con rumbo hacia la ciudad de Acayucan, mientras que el
lugar era un hervidero de personas intentando ayudar a los lesionados y
otras más huyendo también del lugar, dejando regados los regalos,
comida, refrescos y cervezas.
Una hora más tarde acudió al punto personal del Servicio Médico
Forense y policías ministeriales así como estatales y hasta federales
acordonando la zona para evitar más intromisión de curiosos, aunque de
los maleantes ya nada se supo.
Juan Díaz Covarrubias vivió de esta manera una de sus noches más
sangrientas y ciudadanía en general estaba consternada por esta
situación.
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Un comando fuertemente armado irrumpió en una fiesta infantil la
noche de ayer viernes y ejecutó a tres hombres durante el evento que se
llevaba a cabo en el restaurante ‘El Chaparral’ a un costado carr federal matamoros -puerto juarez en la localidad de
Hueyapan de Ocampo en el estado de Veracruz.
Los agresores presumiblemente llegaron a bordo de una camioneta
Windstar blanca y cubiertos del rostro con pasamontañas, al identificar a
Rodolfo Wirth de 54 años y a Rodolfo Armando Wirth Cobos, de 29, a
quienes acribillaron con armas AR-15, en medio de la agresión falleció
también el menor José María Solís, de 17 años y trascendió que dos
personas más resultaron heridas de bala.
En el interior del restaurante El Chaparral quedaron mesas volteadas,
sillas tiradas, pedazos de las piñatas regados y charcos de sangre de
los tres ejecutados.
Cabe destacar que Wirth Cobos y el menor de edad eran primos del exalcalde de este municipio, Gaspar Gómez Jiménez.
Fuerzas federales acudieron al lugar para levantar las diligencias correspondientes.
Peritos del Servicio Médico Forense de San Andrés Tuxtla hicieron el levantamiento de los cadáveres.
El diario Acayucan consigna en su edición de hoy que la
familia Wirth ya había sufrido un atentado meses antes, cuando su
domicilio fue baleado por un grupo armado.
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